Cuando hablamos de eficiencia energética en el hogar nos referimos a consumir menos energía, pero sin sacrificar las funcionalidades ni las comodidades de nuestras casas; es decir, se trata de hacer un uso más responsable, consciente y eficiente de este servicio público. 

Hablamos con Camilo Erazo, asesor de la dirección de Regulación del Grupo Energía Bogotá (GEB), quien nos explica que la eficiencia energética en el hogar tiene varios beneficios, pero el principal, y más evidente, “es que al disminuir el consumo estamos reduciendo el costo que pagamos mensualmente en nuestra factura”. Además, “también cuando ahorramos energía estamos contribuyendo a la sostenibilidad del sistema y a reducir las emisiones que se producen cuando se genera la energía: también estamos aportando al cuidado del medio ambiente”.

Pero ¿qué podemos hacer en casa para implementar la eficiencia energética?

1.    Cambie de hábitos en el consumo; es decir, cambie la forma como está consumiendo la energía.

“Dentro de los hábitos de consumo que podemos cambiar está el no utilizar las luces durante el día y hacer uso de la luz natural. En las noches es recomendable prender solo las luces que se necesitan; desconectar los aparatos electrónicos o electrodomésticos que no estemos utilizando, incluyendo los cargadores de los celulares y de los computadores portátiles; usar la lavadora con la carga completa, y ajustar la temperatura de la nevera a los niveles adecuados”, explicó Erazo.

2.    Haga una renovación tecnológica; es decir, cambie los aparatos o los electrodomésticos ineficientes por otros más eficientes y que consuman menos energía.

“Cuando hablamos de la renovación tecnológica podemos cambiar las bombillas por unas de menor consumo, como las de la tecnología led; podemos instalar sensores o temporizadores que nos ayuden a hacer un mejor uso de la iluminación; también es importante fijarnos en las etiquetas de eficiencia energética que tienen los electrodomésticos, en donde nos dan información del consumo y del desempeño que tienen; es decir, a partir de estas etiquetas podemos revisar cuáles aparatos son más eficientes y hacer una compra mucho más consciente”.

El ahorro energético es compromiso de todos y este es parte fundamental de la transición energética a la que le apuesta el GEB, para seguir proporcionando energía que contribuya a la lucha contra el cambio climático y que genere desarrollo y bienestar en las personas y a sus territorios.